El Yo Soy, es el poder de ser, el poder del universo, el Camino hacia el Padre.
El poder de invocación del Yo Soy, da luz al que lo pronuncia, da unión con el universo, es apoyo con hermandad, da paz en la existencia, es equilibrio y experiencia, es evolutivo y maestría.
El Camino, es el que trazas cada vez que piensas algo; cada vez que generas una causa proyectas instantáneamente un efecto que te lleva a la comprobación de la ley, “Pide y se te os dará” o “Con la vara que mides serás medido”, es tu elección y está en tu sabiduría hacer lo que tengas que hacer.
Yo estoy, en cualquier decisión que tomes, porque eres mi hijo y yo estoy en ti, en las buenas y en las malas porque te amo. Sólo sigue con voluntad y constancia tu camino, de lo que hayas proyectado, no abandones tu objetivo, crece con él, es tu Camino.
Si encuentras otros caminantes agobiados, por su falta de voluntad, anímalos que continúen en su caminar, que seamos, caminantes de la evolución, de la creación.
Todos creamos todos los días la eternidad, la eternidad es creación y tu eres creación y creador, cada paso es una creación tuya, que te muestra lo que has caminado y sirve de guía para otros caminantes.
Todos seguimos la luz, la luz está en ti, la oscuridad no conduce a ningún camino, sólo produce inestabilidad y muerte.
Más quiero, que despierte de la ilusión del mundo, que son caminos, que no conducen a ninguna parte.
Busca el camino de la verdad, él está en tu corazón, sólo tienes que pedirlo y éste se te abrirá.
Yo Soy La Resurrección y La Vida. El que me sigue tendrá vida eterna.
Yo Soy, El Camino, La Luz y La Vida
